En esta oportunidad queremos referirnos a un tema de extrema importancia dentro de nuestro rubro. Es tal la relevancia que tiene, que es el criterio de competencia por el que se rige cada uno de los participantes en el mercado. Es la vara con la que nos miden nuestros clientes.

¿Que otra cosa mas importante que la CALIDAD?

Es el determinante de éxito o del fracaso de cualquier emprendimiento. La calidad, básicamente es “el valor que nosotros entregamos a nuestros clientes”. Es decir… ¿Qué tan valiosos somos para ellos? Por supuesto que un parámetro de medición tan importante se asocia a una inversión económica, porque la única manera de ofrecer lo mejor, es teniendo a nuestra disposición, lo mejor.

Lo mejor es lo más valioso.

Si ofreces lo mejor, ofreces mayor valor y tus clientes perciben mayor calidad. Pero las leyes del mercado nos obligan a funcionar en base a márgenes para poder obtener la rentabilidad necesaria que nos permita cubrir nuestros costos para seguir operando.

¿Pero si nuestros costos son demasiado altos?

Uno de los razonamientos lógicos como estrategia para reducir los costos es comprar insumos más baratos (por lo tanto de menor calidad) y por un tiempo parecerá funcionar porque aparentemente tus márgenes podrían aumentar. Pero nuestros clientes tienen una percepción muy refinada acerca de lo que compran. El dinero es siempre un bien muy escaso y debe ser sabiamente utilizado. Si nuestros clientes nos conocen por ciertos atributos de calidad y son fieles a ellos, notarán inmediatamente que algo no anda bien con nuestro producto.

-“La calidad ya no es la misma.”

Un valor disminuido permitirá realizar una venta ¿pero diez? Si tienes un producto muy bueno, pero debido a la necesidad de bajar los costos sacrificas su calidad, tu cliente lo notará y es muy probable que no vuelva a comprarlo en el futuro. Es la calidad de tus productos lo que mantiene tus clientes contigo. Ofrecer productos de baja calidad es letal para cualquier negocio que busque permanecer en el tiempo. Además, en un contexto de mercado donde todos necesitamos reducir nuestros costos, a menos que seamos gigantes, tendremos una capacidad muy limitada de respuesta.
Llegará un punto en el que no podremos reducir más nuestros costos y nuestra reputación por haber disminuido nuestra calidad, ciertamente será una carga muy difícil de llevar. Es la explicación del conocido refrán “Lo Barato Cuesta Caro”.
Otro camino, el más duro, el más largo, pero el único que tiene probabilidades de éxito, es cuidar tu producto. Garantizar la calidad del producto final, cueste lo que cueste. Sólo nuestra inventiva, correcto asesoramiento y capacidad estratégica nos permitirá detectar qué áreas de nuestras operaciones podemos trabajar para reducir sus costos sin disminuir la calidad de nuestro producto final.
El éxito solo puede ser alcanzado al cuidar a nuestros clientes, sumar a nuestra cartera aquellos que se han decepcionado de nuestra competencia y trabajar un concepto que es la clave de la sobrevivencia de las grandes empresas:

Prestigio de Marca.

No es más que consistencia en la calidad que han ofrecido a lo largo del tiempo. Claramente es un concepto prácticamente intangible, porque funciona en base a la percepción que tiene el mercado acerca de nosotros. Pero las grandes empresas no siempre fueron grandes. Como nosotros, partieron en un pequeño taller, o una pequeña cocina, siendo completamente desconocidos para el resto del mundo. Es el cumplimiento de su promesa lo que las ha convertido en lo que son hoy:

– Confiables.

Para cerrar esta reflexión, adquirir insumos de calidad no es necesariamente más caro. Las materias primas de alto valor pueden tener excelentes rendimientos, por lo que utilizarlas para producir nuestros alimentos puede ser más barato. Podrían obtener un producto con mejor textura, o incluso más sabroso. Utilizar excelentes insumos permitiría dar a conocer a nuestros clientes que su dinero será bien invertido al momento de comprarnos y ellos lo tendrán muy claro. Por esta razón, encontrar distribuidores que entreguen un excelente servicio, es uno de los puntos clave para poder obtener productos de calidad a precios razonables.
Este artículo termina planteando una pregunta para ti:

¿Es realmente más caro invertir en materias primas de calidad?

Te invitamos a respondernos en los comentarios.